En este blog abundarn los artículos sobre neuro-arte, la apasionante descripción de los principios activos desencadenantes en nuestra química neuronal del sentimiento artístico, tan complejo como fundamental para nuestra existencia. A colación de este propósito nos viene bien el ejercicio que organiza Alicia yuxtaexponiendo dos discplinas artísticas en el mismo espacio y sometiéndolas a nuestros sentidos en la misma sucesión de instantes.
El maridaje de disciplinas distintas abre nuevas vías dendríticas entre axones neuronales que responden a entradas de estímulos perceptivos correspondientes a sentidos dispares. Esa apertura de conexiones es lo que conocemos como poder evocador de las artes. Un aroma arranca de nuestra memoria imágenes... Una tonadilla empuja a la conciencia escenas con todo lujo de detalles sensoriales. Cada disciplina artística dispone de un sentido y cada sentido responde a una o varias disciplina. Ese es el principio activo de la evocación, invocación, provocación, rememoración, imaginación... conjunto de emociones que saltan como resortes en nuestro sensible cerebro gracias al que sabemos que somos, que estamos.
Hoy me complace traer un encaje de texturas interdisciplinares urdidos con delicadeza tras la elección conciezuda e inteligente de los materiales que utiliza. El resultado es un texto traslúcido que deja ver lienzos de Matilde Alonso sobre los que flotan cimbreantes los versos de Mía Gallegos y de Agustín García Calvo en dos sucesivas entradas.
El texto explica quizá imágenes o las imágenes serenan renglones. Ambos elementos generan una tercera sustancia nueva no presente antes en la esencia de sus componentes como transmutación alquímica. Belleza y dulzura engendran una caricia un poco, sólo un poco amarga aunque menos que armónica. Palabras y colores se abrazan y se emocionan en la misma frecuencia.
Dedicado a Agustín, a Mía, a Matilde y a Alicia que ha juntado las piezas.
En su blog 'ALGO MÁS QUE PALABRAS' Alicia Marmisa dice:
Palabras siempre acompañadas de algo más.
Palabras que evocan música, nunca ruido.
Palabras en silencio.
Toca el cuadro rojo de Matilde y entra en las palabras Mía Gallegos.
Toca el cuadro azul de Matilde y entra en las palabras de Agustín García Calvo.